La formación educativa en un mundo laboral tan competitivo como el de Colombia es un punto clave para incrementar las posibilidades de acceder a mejores vacantes y mayores sueldos, pues, de acuerdo con información de CEIPA, los posgraduados en el país ganan entre $6 y $10 millones de pesos, es decir, entre 4 y 7 veces más que los ciudadanos que devengan un salario mínimo en el país.
Sin embargo, son muy pocos los profesionales que cuentan con un posgrado, alrededor de 16 por cada millón de ciudadanos. No obstante, las matrículas de especializaciones crecieron un 27.3% y las de maestrías un 116% en la última década, gracias a modelos pedagógicos flexibles y asequibles.
¿Qué buscan los profesionales a la hora de aplicar a un posgrado?
La Fundación Universitaria Ceipa, sostiene que los modelos de educación de los posgrados son fundamentales para que los profesionales se interesen por inscribirse a uno.
“La teoría por sí sola ya no es suficiente. Los profesionales buscan posgrados que les brinden oportunidades prácticas para aplicar sus conocimientos en situaciones del mundo real. La aplicación inmediata de teorías a través de proyectos prácticos refuerza la comprensión”, sostuvo Diego Mazo, rector de CEIPA.
Por lo tanto, un modelo que ha logrado captar la atención de los profesionales es el ‘UBFlex’, que es un sistema pedagógico que se basa en el ‘learning by doing’, donde los estudiantes resuelven problemas empresariales reales para un aprendizaje práctico.
La flexibilidad del modelo UBFlex, que permite CEIPA, es la combinación de autoaprendizaje y colaboración, respaldada por docentes y líderes empresariales, que transforma a los estudiantes en consultores capaces. La eficiencia se logra con un sistema tecnológico innovador para aprender tanto en el aula como de forma remota.
“Los posgrados permiten la especialización y actualización en un entorno laboral dinámico. Las empresas valoran candidatos con habilidades técnicas y formación especializada, fomentando el aprendizaje continuo. Este enfoque beneficia tanto a los individuos como al crecimiento e innovación empresarial.”, añade Mazo.
La metodología híbrida gana terreno en las aulas de posgrados
Cabe señalar que la demanda de programas de educación superior con modalidad virtual ha venido incrementando en los últimos 10 años, pasando de 26.852 matriculados a 446.063 en 2022, de acuerdo con datos del SNIES.
“Hemos entendido que la presencialidad y la virtualidad son metodologías complementarias, por lo tanto, desde hace más de 20 años materializamos nuestra apuesta por la virtualidad, sincronicidad y presencialidad, con programas académicos en estas dos modalidades”, agrega Mazo.
Desde especialización en gerencia financiera o de mercadeo, hasta maestrías en administración, la institución educativa ha implementado el modelo UBFlex en todos sus programas, logrando que la tasa de empleabilidad de los egresados de posgrados sea del 93,9%. Además, los egresados de los programas virtuales ganan un 28,8% más que el promedio nacional de quienes se gradúan de programas virtuales de otras instituciones.
La búsqueda de posgrados con metodologías flexibles, innovadoras, prácticas, híbridas y colaborativas refleja la necesidad de los profesionales de adaptarse y prosperar en un entorno laboral en constante evolución.
Estas metodologías no solo responden a las demandas actuales del mercado, sino que también empoderan a los estudiantes para convertirse en líderes capaces de enfrentar los desafíos de un mundo laboral cada vez más complejo, ambiguo y dinámico.
Artículo tomado de Noticias RCN.
